El siguiente soneto lo escribí el 30 de Mayo del 2016. Lo compuse
tras la visita de mi amigo Antonio, un compañero de la universidad que
ahora mismo está trabajando en otro país. Al principio se lo dediqué a
él, pero ahora extiendo mi dedicatoria a todos mis amigos que están
trabajando en el extranjero.
¡Cuántos momentos hemos disfrutado!
Esas reuniones que en tu compañía,
prolongadas hasta que el sol salía,
en nuestra «resi» hemos realizado.
Pero ahora todo eso es el pasado,
a esos tiempos sin duda volvería
donde solamente había alegría
y la universidad no haya acabado.
Para tener un trabajo normal
a una lejana ciudad has partido,
sin importarte lenguas ni banderas.
No es por el codiciado y vil metal
por lo que de nuestro país te has ido
sino que un futuro mejor esperas.
Hola, Pedro. Tristemente es la realidad de muchos amigos y familiares la que presentas.
ResponderEliminarGracias por compartir tus escritos con el mundo. Espero que encuentres lo que buscas. Un saludo
Gracias por comentar. Muchas veces, lo único que podemos hacer frente a la adversa realidad es describirla con bellas palabras.
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